Niños, niñas y adolescentes tienen derecho a que todos sus derechos sean respetados sin distinción alguna de razones como su sexo, expresión de género, orientación sexual, apariencia personal, lugar de vivienda, permanencia en dispositivos de protección o justicia juvenil, raza, color de piel, idioma, religión, creencias, opiniones políticas, origen étnico o
social, posición económica, impedimentos o características físicas, discapacidad o cualquier otra razón.